Sexto año

Es increíble cómo algo tan sencillo, simple, te puede cambiar la vida. Cualquier decisión que tomes cambia el destino, por muy pequeña que sea. Y ni siquiera sé si creo en el destino pero supongamos que sí creo. Muchas veces me pregunto si en la vida tenemos algún sentido, si tenemos a alguien que nos guie en alguna dirección, que vayamos por impulso o curiosidad tal vez, pero que realmente no sepamos qué nos lleva hacia allá. Pienso en el futuro que nos depara, y sinceramente no entiendo mucho qué está pasando ahora. No se si pensar en ello, o no. Pero les soy sincera tengo que pensarlo, porque es una nueva decisión que tengo que tomar sola, yo sola, sin la ayuda de nadie, sin que nada ni nadie me diga qué hacer. Porque es una decisión mia, que me pertenece. Realmente es algo que cambia, siento que no quiero hacerlo, pero tengo que hacerlo. Es inevitable, algo del "destino" por asi decirlo, y del tiempo. No podemos elegir seguir siendo jóvenes, aunque si pudieramos sé que muchos lo harían. No podemos detener el tiempo, ni siquiera un par de segundos, ni tampoco podemos hacer que todo vaya más lento. Este es un momento de la vida en que entiendo la famosa frase de Mafalda, "paren al mundo, quiero bajarme". Es que no entiendo nada, pero entiendo todo. Sé lo que tengo que hacer pero a la vez no. Tengo que decidir pero no se qué. Y esa decisión es tan importante como lo que viene, es lo que voy a hacer con mi vida. Y realmente pienso si las cosas que me gustan ahora son las que me van a beneficiar, pues lo que quiero no es común, y nada parecido a lo que todos hacen. Sé que alguien con cabeza decidiría estudiar una carrera con buena salida laboral, con bueno todo, pero me parece aburrido, por eso es que no se qué decidir. Digamos que tengo la cabeza llena de preguntas, ¿entienden? ni siquiera sé a quien le hablo porque... nadie lee esto. Y si alguien lo lee no me va a servir de nada, porque nada va a cambiar la confusión, es que todo esto se vuelve una frustración. ¿Dejar de pensar en eso? imposible! No way!, es algo que llevo, además de pensar en mi novio, y en que quiero dormir porque estoy cansada de todo, también pienso en esa decisión que tengo que tomar, porque además de mi futuro implica a mis seres queridos, que siendo una chica tan dependiente, parece una enfermadad ya, siento que sola no puedo, alguien me tiene que dar el empujón para caminar, y si me caigo ya veré. Es que ni siquiera sé que hacer, y ya que no me entienden podríamos hablar de otras cosas. Pero tampoco querrán saber sobre otras cuestiones menos importantes, porque no hablan de mi. Ja, poco creida. Lo dije para romper el hielo y dejar de aburrirlos, una frase irónica. Quizás lo que siento es porque sé que dejo todo atrás, pero no quiero ver lo que tengo adelante. Es que me siento cómoda, bien, tan feliz viviendo ésto. Siento que no voy a vivir otro secundario, que la gente que voy a conocer jamás van a reemplazar a mis amigas, a mis compañeros que ahora tengo, que cada día me sacan risas hasta que me duelen los músculos del estómago. Todo se hace mágico cuando uno es adolescente y tonto, bue.. para no decir serio, responsable. Es que pueden pasar tantas cosas en un aula poco espaciosa con 42 pendejos. Cada comentario, cada risa, cada complicidad, cada joda, todo pasa por mi cabeza, y a decir verdad (creo que lo saben) nadie va a reemplazarlos porque ocupan una parte de mi. Y nunca voy a olvidarlos, es que es todo tan divertido, un 6to año inolvidable, y eso que todavia no terminó. Todos sabemos que lo que viene es un mundo totalmente diferente, pero siento que no estoy lista para dejar éste. Y si, soy de esas que van a llorarse la vida cuando sea el último día de clases, la fiesta de egresados, bariloche, y cuando todos nos vayamos para nuestros caminos, solos y con esfuerzo para conocer la verdadera realidad de las cosas. Tal vez me queden algunas lágrimas para sacarlas afuera antes de que me desidrate cuando me sienta sola. La cuestión es que es algo dificil que todos tenemos que afrontar. Algunos tienen más miedos que otros, pero nada le quita lo dificil a la situación. Ahora más que nunca es tiempo para nosotros, nadie nos va a quitar los recuerdos que traemos de todos estos años juntos metidos en ese colegio (cárcel) que nos hizo renegar tanto tiempo, pero sé que cada uno de ustedes, todos, lo vamos a extrañar. NOS VAMOS A EXTRAÑAR, porque el colegio y el aula, ¡es nada sin nosotros!

Pam